Cero Tolerancia
Desde temprana edad inicia en los medios con participaciones en voz comercial de su natal Puerto Plata.
En prensa escrita destacó como reportera de investigación y columnista en rotativos decirculación nacional en República Dominicana.
Reportera y asistente de Editor en El Sol Latino, semanario de la ciudad de Filadelfia Pensilvania. Dado sus destacados logros y liderazgo dentro del medio periodistico en dicha ciudad, fue seleccionada por dos años consecutivos(2005 y 2006) como Personalidad del Año en Hispanic Choice Awards.
Su versatilidad y dinamismo como periodista especializada en deportes, se solidifica en Estados Unidos al crear su columna “ Rincón Latino”.
Ha sido comentarista invitada en la cadena en español de Los Filis, equipo profesional de beisbol de la ciudad del Amor fraterno.
Fue reconocida por la premiación Mundo Latino, como “Mejor reportera hispana” en el 2003. Realizó algunos programas especiales para la filial de Univision, en Filadelfia.
Es egresada del Instituto de Liderazgo Latino, en la primera promoción en el 2002.
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El mundo ha cambiado y las facilidades de tantas herramientas para comunicarse son un verdadero problema. Gente con odio, resentimiento, frustraciones y con falta de tolerancia abundan en todos los aspectos de la vida.
Refiero este preámbulo, para tratar el caso que ha consternado a los amantes del deporte y los millones de seguidores de la Maratón de Boston. Lo que parecía un rutinario final terminó con una tragedia que enluta al mundo deportivo y de la gente que hoy lamenta la pérdida de sus seres queridos. Asi, de igual manera las decenas de heridos como consecuencia de la perversidad de los que cometieron el crimen. Siguen las investigaciones del horrendo y nefasto hecho, mientras tanto queda el mal sabor de enfrentar en esta parte del mundo esa nefasta acción que es repudiable.
Los que detonaron los artefactos, fueron amaestrados por las mentes perversas que quieren llenar de terror a gente simple, común y que no tiene en sus corazones la enfermedad de causar luto y dolor. Es, por consecuencia lo que dejan al descubierto los claros vídeos donde se indica cómo hacer una bomba, cómo detonarla y qué efectos fatales causan si se colocan en un lugar y luego a control remoto se activan. Estos nuevos medios de brindar a la gente “información” que pueden ser vistas hasta por teléfonos móviles, es una amenaza para el mundo. Hay que buscar y encontrar a los culpables y con “cero tolerancia” hacerlos pagar el daño que han hecho.
En ese orden, pero luego de anotar un gol en un partido de fútbol, el jugador ex capitán de la selección sub 19 de Grecia, Giorgos Kalidis, con 20 años de edad; se le ocurrió celebrar su hazaña con un saludo Nazi. La sanción es un ejemplar modo de indicar que es INACEPTABLE que se ponga como un júbilo lo que fue la desgracia de tanta gente. Esa época llenó al mundo de indignación. Acciones como esa no se pueden tolerar jamás. Asi se procede, los llamados líderes tienen que hacer la gran diferencia, en un mundo que cada vez es más complejo y sumanente difícil lograr saber lo que esconden los que se creen “superhéroes”. El deporte es mente sana, los cuerpos que pasan la barrera de lo que humanamente se logra para destacarse tienen que ser sancionados ejemplarmente.
Otro acto inaudito y horrendo fue el que perpetuó un joven dominicano, llamado futuro prospecto de las Grandes Ligas. El muchacho, mató a un anciano a machetazos, en la República Dominicana. Alegadamente el crimen lo cometió porque según testigos el muchacho estaba utilizando unos “suplementos” para rendir más en su juego, personas asi que llegan con trampa a colocarse en una posición importante dentro del deporte, no ameritan ni una sola línea para destacar su labor y buen rendimiento.
Es entendible, que la miseria y falta de educación hace que los padres entren en ese sucio juego, para apoyar a sus vástagos. Lo que tiene que asumir las autoridades llamadas a regular esos casos, que se han vuelto comunes en los últimos tiempos, requiere de voluntad, seguimiento y mucha orientación. Esto evitará que sociedades sanas, con oportunidades de desarrollo y naciones soberanas, alimenten en la juventud el que los padres manden a sus hijos a la escuela de manera “obligatoria”. No se justifica que un joven en edad escolar sea llevado a los estadios de béisbol a practicar, cuando se supone debería estar en las aulas.
Asi las cosas, esperemos ver acciones para corregir ese cáncer de la violencia que lastiman el mundo.